Desde niño quede maravillado al observar la naturaleza, sobre todo la primera vez que vi microorganismos por un microscopio. Me sorprendió contemplar tanta vida que escapaba a mi vista.

martes, 21 de mayo de 2013

CARTA AL PADRE

"... Querido padre:

...Hace poco me preguntaste por qué digo que te tengo miedo. Como es habitual no supe que contestarte: en parte, precisamente por el miedo que me inspiras; en parte, porque en la justificación de dicho miedo intervienen demasiados pormenores para poder exponerlos con una aceptable consistencia..." ( F. Kafka. Carta al padre ).

"... Al despertar Gregorio Samsa una mañana, tras un sueño intranquilo, encontróse en su cama convertido en un monstruoso insecto..." ( F. Kafka. La metamorfosis ).



Siempre he sentido una gran admiración por la persona de F. Kafka, a la cual conozco como muchos de nosotros a través de su literatura. Me fascina su figura, su expresión facial. Tal y como yo me lo imagino, una frágil belleza de la naturaleza, demasiado fuerte como para sentir y experimentar la naturaleza humana. Pongo el énfasis en demasiado fuerte porque precisamente alguien así acostumbra a ser visto como débil por los que se creen fuertes. Muchos de ellos ni siquiera se han parado a pensar que quiere decir ser fuerte o débil, más allá de lo que hayan podido escuchar decir a otros. Alguien así convivio con la soledad, es decir con la muerte. Vivió pues con dignidad, es decir, no se engaño a si mismo, supo que era algo absurdo y mediocre, un accidente de la naturaleza, no más, como cualquier ser humano o ser vivo. La existencia no puede tener ningún sentido más que en la angustia ante la muerte, lo demás es palabrería, o hacer el payaso, ser idiota y además presumir de ello, como acostumbramos a hacer la mayoría de nosotros.

Con que elegancia se dirige a su padre, ya desde niño, viviendo y experimentando las cosas tal y como son y no como este se las quiso mostrar. Aquel niño quiso hablar de verdad con su padre, este no estaba preparado para ello, demasiado preocupado por aparentar estar vivo. Siendo así, seguramente aquel niño se sintió muerto, aplastado por tanta vigorosa vitalidad. Posiblemente se asustó y sintió vergüenza ajena ante tanta extravagancia. Además comprendió muy pronto, tal y como expresará siendo adulto, que no era un problema de su padre, sino que vivir consiste en eso. El personaje del padre venía a ser una buena caricatura del exceso de vida, de la ansiedad ante la muerte. Esta es la gran lección que aquel niño aprendió de su padre y por lo cual nunca pudo expresar su agradecimiento sincero. Si no hubiese sido alguien tremendamente humano que siente la vida tal cual es, se podría haber engañado así mismo y a su padre, la comunicación hubiese sido posible. El padre, seguramente intuía algo de lo que su hijo quería y ansiaba por comunicarle, pero tras aquella intuición asomaba el perfil de la guadaña, entonces sin ni siquiera atreverse a pasar ni el más mínimo miedo, se empeñaba en vivir con más fuerza, vigor y entusiasmo. A su vez empujaba a su hijo a vivir, el cual era incapaz de vivir sin dignidad.

F. Kafka se convirtió en cucaracha, sintió sus órganos en descomposición, lo que sería en su momento sus pulmones enfermos. La comida cuando se esta vivo se disfruta en compañía, se saborea. Así de sencillo es vivir. Sin embargo quien tiene miedo a morir, no disfruta de la comida, la engulle desesperadamente. Aquel niño no pudo disfrutar de la comida junto a su padre. Fue engullido por este y se fue pudriendo en la tormentosa y trágica digestión de aquel padre, empeñado en no morir. En un intento desesperado por llamar la atención de su padre y para mostrarle lo que que quería hablar con el, recurrió a un personaje figurado. Algo que por su misma extrañeza ya no pudiera ser ignorado por más tiempo. Se presentó como cucaracha ante el padre. Quizás en ese momento descubrió que tal dialogo no era posible, fue digerido por la vida.
Se dejo digerir y atropellar por la vida. Y sin embargo nos lego un valiosísimo ejemplo de lo que es la vida. Se acercó lo suficiente a la naturaleza humana, y desde allí ofreció un testimonio para aquellos que alguna vez tuvieron el placer de escucharlo y para los que ahora lo podemos leer. Lastima que el padre no pudo escucharle, el verdadero poder del mensaje suyo consistía en mostrarnos la vida tal y como es, ya que por estar tan vivo pudo experimentar en la relación con su padre lo que no es vivir, pero para vivir él su padre tenía que vivir también. Este último prefirió ser un muerto en vida y no dejo que su hijo viviera. ¡ Y aun así cuanto vivió aquel niño! Un ser que no fuese lo suficientemente frágil y duro al mismo tiempo no hubiese podido vivir y mostrar tanto ante tal adversidad que para él fue aquella figura paterna. Algunos psicoanalistas acostumbran a hablar del fantasma del padre. Y tienen razón, todo aquel que aparenta ser algo que no es, en el lenguaje coloquial también se le acostumbra a llamar fantasma. Quizás quien persiguió al padre fue la vida, que este se figuraba cual fantasma en aquel niño. Tuvo miedo de ver la vida tal cual es y huyo de su hijo.




























lunes, 20 de mayo de 2013

CIENCIAS COGNITIVAS

Comparto este interesante articulo que nos habla de orientaciones teóricas recientes en las ciencias cognitivas. Si bien los estudios en inteligencia artificial han avanzado mucho para entender los procesos cognitivos humanos, parece que hay muchos aspectos que no son abordados y que resultan significativos respecto a como funciona nuestro cerebro. No sería solo una cuestión de computación y procesamiento de la información, sino que también sería importante la interacción y el aspecto emocional, sensorial y motriz ligados al comportamiento humano. Es lo que estos estudios llaman cognición corpórea.

 
http://medina-psicologia.ugr.es/cienciacognitiva/?p=69



domingo, 19 de mayo de 2013

REDES SOCIALES

Vivimos en un mundo en red, en una inmensa red en la que todo esta conectado. Esto se fue haciendo cada vez más evidente al conocer mejor el mundo que nos rodea y su funcionamiento, desde la física, la química y la biología. También se hizo muy evidente a partir de los estudios en ecología, viendo como los seres vivos conviven en ecosistemas donde todos están conectados entre ellos. Cualquier cambio en un lugar del ecosistema tiene repercusiones en el conjunto y los demás miembros. En el área social también, desde la sociología y la antropología social, se fueron investigando estas redes. Por ejemplo, en el estudio del parentesco o las redes sociales de personas emigradas a las ciudades y cinturones industriales en África, tras los procesos coloniales.

Pero es con el avance de la tecnología cuando ya se pone de manifiesto de forma muy evidente el fenómeno. Sobre todo a través de internet. Una gran red que conecta de forma virtual. Pensándolo parece que tampoco descubrimos nada que al fin y al cabo no estuviese ya ahí. Más bien, reproducimos ciertos mecanismos que ya operaban. Resulta curioso comprobar como toda innovación y construcción humana no deja de ser un modelo de lo natural. Los aviones que vuelan igual que las aves. Esos edificios con sus esqueletos de vigas tal esqueleto del cuerpo humano. El desarrollo de la informática como medio sofisticado de transmitir información, no deja de recordar al sistema nervioso y sus redes neuronales.

Quizás el enredo mayor sea el buscar un significado, el por qué, a qué propósito sirve todo en su conjunto, cuál es la finalidad, si es que la hay. Esto por el momento seguirá perteneciendo a las grandes preguntas que siempre nos acompañaron desde que tenemos uso de razón. Aunque tampoco deberíamos ser presuntuosos al pensar que otros seres vivos no se cuestionan la realidad, quién sabe. Lo que si parece es que el conocimiento avanza y nos lleva ventaja, e incluso parece indiferente a nuestra cotidianidad. Yo, igualmente quiero mantenerme en lo ecuánime y no oscilar en los extremos, o bien del repudio a la amenaza del avance científico que se vive como deshumanizador, o bien la exaltación sin más de las nuevas tecnologías. Siguiendo la máxima del "conócete a ti mismo" prefiero no ser indiferente al conocimiento, sino ser consciente, en el caso de las redes sociales, por ejemplo, de lo sensibles que somos a los estímulos al relacionarnos y siendo así cuidarme y cuidar mis relaciones. Queda aún sin respuesta la cuestión de la finalidad. En tal caso puede que la finalidad simplemente consista en vivir. Pero, ¿ para qué? ¿ Quién sabe? Eso ya es algo que escapa a mi comprensión, en lo intelectual y vivencial, ya que mi intelecto y vivencia inevitablemente, por suerte o por desgracia, se limitan a mi mismo y no al conjunto en su totalidad.

 


Pongo el enlace a un breve documento televisivo donde se habla de redes sociales:

http://www.xiptv.cat/embed/85823?iframe_width=692&share=&iframe_height=423&height=377&width=670"

viernes, 17 de mayo de 2013

PRESENTE Y FUTURO DE LA ANTROPOLOGIA SOCIAL Y CULTURAL

http://vimeo.com/32238461

Comparto esta interesante entrevista, que viene a ser una buena reflexión sobre la disciplina antropológica.

Carlos Reynoso es un antropólogo argentino que trabaja sobre las cuestiones de epistemología en la antropología social y cultural. Aboga por la interdisciplinariedad y la necesidad de utilizar la computación para formalizar las teorías sociales.



domingo, 5 de mayo de 2013

DEMASIADO HUMANO.

La estupidez humana no tiene límites. El estúpido e insolente ser humano tiende a pensar que todo gira a su alrededor, a un palmo de su nariz. Tres golpes muy duros fueron asestados a tal criatura para que pudiera despertar de su sueño de omnipotencia.

Primero fue Copérnico, quien demostró que no es el sol el que gira alrededor de la tierra, sino al contrario, la tierra gira alrededor del sol. Después Darwin con la teoría de la evolución, echo por tierra los mitos de la creación divina. Finalmente, Freud, puso en evidencia la racionalidad de la que tanto presume esta criatura.

Después de este gran avance en la ciencia que ha continuado hasta nuestros días, parece que la herida narcisista no acaba de cerrarse. Le pese a quien le pese el ser humano debe ser "único" y "especial".

Vemos como se aferra a la religión y todo tipo de mitos y creencias, antes de comprender pacientemente que es muy poquita cosa, prácticamente nada en la historia de la tierra, y no digamos ya del universo. Sin embargo estas criaturas para calmar su angustia se explican historias, se seducen los unos a los otros para sentir una y otra vez el placer de estar vivos. Y la verdad es que esto no es algo negativo en sí, forma parte de nuestra naturaleza vulnerable. Lo que si que resulta estúpido es no pararse a pensar y esperar a que alguien les venga a decir lo que quieren escuchar. El mundo esta lleno de profetas y vendedores de felicidad. Más estúpido aún es la negación de la vulnerabilidad, el querer seguir siendo omnipotentes, vamos los "mejores", los " más todo". Esto solo lleva a la búsqueda de la satisfacción inmediata, a creerse dueños y soberanos, y al fin y al cabo a destrozar todo a su paso. La mejor metáfora que se me ocurre es pensar en como la naturaleza le esta ofreciendo margaritas a los cerdos ( con perdón a los cerdos, que no merecen tal comparación ).

El ser humano se cree que es algo importante, es incapaz de asumir que es parte de algo más grande y que se morirá, se desintegrará. Esto le resulta insoportable a esta pequeña criatura. Por eso se agitan continuamente. No dejan de agredirse ( de forma muy sofisticada y socializada ) y de decir sandeces. De burlarse de otros y buscar chivos expiatorios, antes que hacerse responsables de su propia mediocridad. Esto último, con un poco de suerte, les llevaría a reconocerse como vulnerables, pero el coste a pagar en angustia es demasiado elevado. Es más fácil continuar aferrados a todo tipo de religiones, mitos, creencias y a la insolencia. En última instancia se trata de vencer a la muerte, y que mejor forma que articular historias en las cuales poder vencer, humillar a otros. Y contra más empeño en vencer su propia vulnerabilidad, más orgullosa, estúpida e insolente se vuelve la criatura humana.




PSICOANALISIS Y NEUROCIENCIAS

Gracias a los avances en neurociencias y en los estudios de la evolución humana se comprende mejor algo tan complejo como las emociones. Muchas escuelas de psicoanálisis se van poniendo al día y recogen estas aportaciones.

Paso un enlace de un psiquiatra catalán, Ramon Riera, donde presenta su libro ( La conexió emocional ), que habla sobre la conexión emocional en los seres humanos.También nos habla de una de las últimas aportaciones de las neurociencias; el descubrimiento de las neuronas espejo.


http://www.ramonriera.com/la-connexio-emocional.htm






sábado, 4 de mayo de 2013

REDES COMPLEJAS

http://cultura.elpais.com/cultura/2012/07/11/actualidad/1342019165_932644.html


Interesante entrevista a Ricard Solé, investigador en las areas de las redes complejas, sistemas dinámicos complejos, vida artificial, entre otras cosas, y miembro del Instituto Santa Fe.
Ví una conferencia suya sobre lenguaje y redes complejas, también leí uno de sus libros " Redes complejas". La verdad es que se abre todo un horizonte en la ciencia, que también puede resultar muy prometedor para la investigación en ciencias sociales.
¿ Es cierto que acabara quedando obsoleta la filosofía? Interesante cuestión, sobre todo viendo los avances en ciencia y tecnología. Yo la verdad, cada vez siento más vertigo con respecto a la aceleración en la transmisión de la información. Realmente, a veces me pregunto, ¿ hablamos o el lenguaje habla a través de nosotros, será cierta una de las hipotesis que apuntan a que el lenguaje pueda ser como un virus que infecta a los niños, tenemos ideas o las ideas nos tienen a nosotros? ...¿ O nos estará soñando una inteligencia superior, como imaginaba el gran maestro de la ciencia ficción Issac Asimov?... Muchas dudas, eso es bueno...


¿ NATURALEZA HUMANA?

Comparto esta interesante reseña sobre una obra que ayuda a pensar sobre el tema de la Evolución en Antropología Social. La verdad es que se agradece, ya que rehuye de los tópicos que aún predominan en la Antropología social, uno de ellos es cierto rechazo a todo lo que provenga de la biología. Tal obra muestra como abordar la cuestión de manera sosegada, con criterio y sin dejarse arrastrar por las cuestiones ideológicas.





http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=53712934014

EL CONCEPTO DE EVOLUCION EN ANTROPOLOGIA SOCIAL Y CULTURAL: UNA HISTORIA DE ENCUENTROS Y DESENCUENTROS

El debate sobre la aplicación del concepto de evolución en el estudio de las sociedades humanas remite, en última instancia y más allá de la cuestión ideológica, a la dicotomía naturaleza-cultura que marco en su día la delimitación entre las humanidades y las ciencias sociales  por una parte, y por otra, las ciencias de la naturaleza. Sin embargo, creemos que hoy día es posible y necesario una superación de tal dicotomía y un trabajo conjunto ( transdisciplinar ) entre ciencias sociales, humanidades y ciencias de la naturaleza.

Para tener constancia de estos desencuentros, es necesario remitirse a los orígenes de las disciplinas humanas y sociales, y en qué contexto se desarrollan. Además de las relaciones que han tenido con las ciencias de la naturaleza.
Tendremos en cuenta, además del contexto socio-político y económico, el desarrollo teórico por parte de los autores pioneros en el estudio de la evolución de las sociedades y las culturas: H. Spencer, L.H Morgan y B.E Tylor. También los desarrollos teóricos críticos frente al evolucionismo social de estos primeros autores, en particular la escuela boasiana. Y por último, los desarrollos posteriores que han recuperado el concepto de evolución, sobre todo lo que vino a llamarse ecología cultural. Para esto nos basamos en la obra de Ubaldo Martínez Veiga: “ Historia de la Antropología. Formaciones socioeconómicas y praxis antropológicas, teorías e ideologías”.

Por otra parte, nos plantearemos si sigue siendo necesario este debate y hacia donde nos debería conducir. Para esto último, nos basamos en la obra de Laureano Castro Nogueira, Luis Castro Nogueira y Miguel Angel Castro Nogueira: “ ¿ Quién teme a la naturaleza humana?”. Los autores hacen un repaso crítico de la relación que las humanidades y las ciencias sociales han tenido con las ciencias de la naturaleza. En particular, proponen la recuperación en las humanidades y las ciencias sociales del concepto de naturaleza humana, a la luz de los últimos avances en ciencias del comportamiento, ciencias cognitivas y biología evolucionista.
Las Ciencias sociales, entre ellas la Antropología social y cultural surgen y se consolidan como disciplinas científicas en el contexto colonial, de consolidación y expansión del capitalismo. El sesgo ideológico que acompañará en aquella época, tanto el desarrollo teórico en las ciencias sociales como en las ciencias de la naturaleza, estará impregnado de ideas racistas y clasistas que buscaran la justificación de la desigualdad y la expansión colonial. Así hallaremos un darwinismo social, que amparándose y reinterpretando para sus propios intereses conceptos postulados por Darwin en su estudio de la evolución, justificarán la explotación y la desigualdad social, alegando que responden a las propias leyes de la naturaleza donde sobreviven los más aptos y mejor dotados. Los estudios en evolucionismo social, por otra parte, carecerán por aquel entonces de las herramientas conceptuales para articular el estudio de la evolución a las sociedades humanas y la cultura, dando lugar a un evolucionismo unilineal, excesivamente rígido, que abusará en exceso del método comparativo, generalizando y desatendiendo la particularidad y diversidad sociocultural. Además reproducirá el sesgo ideológico del colonialismo que consideraba a los pueblos colonizados como inferiores y menos evolucionados que la sociedad civilizada occidental ( más evolucionada y supuesta meta de la evolución social ).

En cuanto al aspecto teórico y metodológico, vemos que las Ciencias sociales para definir su objeto de estudio se vieron obligadas, de alguna manera, a distanciarse de otras áreas científicas que ya estaban más consolidadas e institucionalizadas, como la filosofía, la psicología y la biología. En este contexto se producirá una separación radical de lo social y cultural con respecto a la naturaleza y la biología. El ejemplo paradigmático es el de uno de los padres fundadores de la sociología, E. Durkheim, que entenderá lo social ( a través de su concepto de hecho social ) como una cosa, una realidad externa y coercitiva que se impone a los individuos. Con el desarrollo en lo sucesivo de la antropología social y cultural sucederá algo parecido cuando se delimite y defina la cultura como objeto de estudio. En lo sucesivo caminaran por separado las ciencias de la naturaleza y las ciencias sociales.
Sin embargo, esta separación no ha dejado de hacerse presente en la antropología social, ésta se ve reflejada en las tensiones teóricas y metodológicas que han acompañado a la disciplina hasta nuestros días y que han resultado ser irresolubles, a no ser que se enfoquen de otra manera. Nos referimos al par individuo-sociedad, naturaleza-cultura, materialismo-idealismo, individualismo metodológico-holismo, agente- estructura, relativismo-universalismo. Incluso aparece la tensión reflejada en el debate en torno si se debe o no considerar ciencia a la antropología social.

Así vemos como las ciencias sociales y las humanidades conviven bajo un modelo teórico o paradigma, que las mantiene a cierta distancia prudente con respecto a las ciencias de la naturaleza, por diversos motivos, entre ellos, tal y como señalábamos, razones morales que no dejan, en cierta manera, de estar justificadas. Podemos destacar como característica de este paradigma, justificable en sus inicios por aquella necesidad de delimitar y hallar un objeto de estudio en competencia con la psicología y la biología, la consideración de las estructuras particulares de cada cultura como realidades sui generis, dotadas de la capacidad de organizar las mentes y la vida social, atendiendo muy poco a los mecanismos psicobiológicos presentes en los individuos.
Pensamos que el puente que nos permite transitar desde la naturaleza a la cultura y viceversa, es el concepto de evolución, y, tal y como nos proponen los hermanos Nogueira, la recuperación, para las ciencias sociales y las humanidades del concepto de naturaleza humana. En las últimas décadas ha habido muchos avances en áreas o disciplinas como las ciencias cognitivas, la biología evolucionista, la psicología evolucionista, teorías de la co-evolución gen cultura. Todas ellas reabren el debate desde el punto neurálgico de la evolución y apuestan por establecer un dialogo y trabajo común entre las ciencias de la naturaleza y las ciencias sociales. Consideramos que la Antropología social tiene mucho que decir como disciplina que ha abordado el estudio etnográfico de la evolución de las sociedades y culturas humanas. Sobre todo desde los estudios que se desarrollaron a partir de J. Steward, L.White, M. Harris,  entre otros, que revitalizaron el concepto de evolución después de que fuera duramente criticado y casi abandonado.

Si bien, sobretodo después de las corrientes teóricas del posmodernismo, el concepto de evolución ha tenido poco protagonismo en la antropología social, no ha dejado de estar presente y abrirse paso a través de grupos de investigadores que pudiéramos ubicar en lo que vino a llamarse la Ecología cultural.
No obstante, dicha integración no es una tarea sencilla para las ciencias sociales y en particular la antropología social, exigen una redefinición de la disciplina y una re conceptualización teórica y metodológica. Estamos de acuerdo con los hermanos Nogueira ( 2008:24 ): “ para poder incorporar los resultados de la investigación naturalista a sus propias indagaciones, las ciencias sociales deben afrontar una profunda re conceptualización que ha de extenderse desde sus compromisos ontológicos a sus herramientas técnicas, pasando por todos los niveles de complejidad teórica y metodológica. Se dirá que una propuesta como esta no es más que un nuevo intento de subordinar y reducir las ciencias humanas o sociales a las ciencias de la naturaleza, una reedición de las ambiciones imperialistas del positivismo naturalista. Indiscutiblemente, en cualquier programa integrador late siempre algo de esto y cualquiera que se tome la molestia de leer a quienes trabajan en estos campos fronterizos podrá encontrar ejemplos de esa naturaleza. Sin embargo, quien se tome la molestia de leerlos también encontrará, con toda certeza, razones suficientes para convencerse de que una tarea así es necesaria e irrenunciable. Las ciencias sociales y las humanidades no pueden seguir soportando sus modelos teóricos sobre construcciones especulativas de la naturaleza humana.”

Hemos tratado de mostrar como tras las  duras críticas y reticencias, en algunos aspectos justificadas, que recibió el evolucionismo social durante el nacimiento de la disciplina se ocultaba una cuestión epistemológica que remite a la posible integración de las ciencias sociales en un programa naturalista que aborde el estudio del ser humano. También, como por motivos del contexto en el cual se desarrolla la disciplina y razones morales, no es posible esta integración.
Sin embargo, los nuevos contextos, pensamos que van en la línea de favorecer un mayor dialogo e integración entre las disciplinas, se necesitan las unas a las otras. La antropología necesita nuevas herramientas conceptuales, ya no tiene sentido tratar de explicarse la realidad sociocultural de espaldas a los nuevos conocimientos que del individuo tenemos a partir de la psicología, neurociencias, biología. Curiosamente estos nuevos desafíos vienen de la biología y psicología evolucionistas, lo cual indica el papel relevante del concepto de evolución. Pensamos que son nuevas oportunidades para el encuentro con las ciencias de la naturaleza, que pude ser muy enriquecedor tanto para ellas como para las ciencias sociales, las humanidades, y en particular la antropología social y cultural.